"La Mujer Y el Voto Municipal"

 

 

En 1877, se dictó el decreto de Amunátegui, el cual estableció  la educación femenina universitaria, decretando “que las mujeres deben ser admitidas a rendir exámenes para obtener títulos profesionales con tal que ellas se sometan a las mismas disposiciones a que son sujetos los hombres” , donde las mujeres debían ser acompañadas de sus madres a la universidad. Tras la dictación de que las mujeres podían comenzar una vida universitaria en el año 1887, Ernestina Pérez junto a Eloísa Díaz, son las primeras mujeres en obtener su título de médicos de Chile.

 

La obtención del voto municipal no es un hecho que se puede marcar como un  hecho casual, sino más bien como el resultado de un proceso que fue paulatinamente creciendo, tras las movilizaciones que se originaron desde 1913 con el club de señoras hasta la fuerte creación Unión Femenina, donde está logró fomentar el inicio del voto municipal.